Dentro del cortísimo espectro de las series con informáticos, se encuentra la subvalorada Halt And Catch Fire.  Ciertamente, no es fácil que un programa con esa temática obtenga aceptación inmediata de la crítica y audiencia a menos que base sus esfuerzos en el sentido del humor del espectador.  Para ejemplos claros, The IT Crowd y más recientemente Silicon Valley lograron atrapar a una buena base de fans gracias a su finísimo humor acompañado de un guión realista sin caer en estereotipos y clichés del informático y/o nerd de las computadoras (a diferencia de la igualmente conocida pero superficial The Big Bang Theory).  A pesar de esa realidad, hoy les traigo algunas buenas razones por las que Halt And Catch Fire merece una oportunidad dentro del valioso calendario de series de cualquier fanático de las buenas historias, especialmente porque no se limita a temas informáticos, sino al desarrollo de los protagonistas dentro de la crónica.

La trama

Halt And Catch Fire está ambientada en 1983, durante el apogeo de la era dorada de las computadoras donde IBM reinaba sin competencia ni detractores.  Un día, Joe MacMillan (ex  ejecutivo de ventas de esa compañía) decide irse a una de sus competidoras (Electric Cardiff) y proponer la creación de la primera computadora portátil de la historia, no sin antes dejar claro que la mejor manera de hacerlo es mediante el uso de arquitectura abierta, es decir, utilizar los mismos componentes que utilizó IBM en la construcción de la primera PC, dos años antes.

A partir de ese momento, no solo somos testigos de la increíble habilidad de convencimiento y palabra que posee Joe, sino el cuidadoso reclutamiento de dos individuos totalmente disímiles entre sí (y con él): Gordon Clarke y Cameron Howe; constituyendo así la tripleta perfecta de inteligencia, emprendimiento y negociación. La misión del trío no se aleja de obstáculos esperables, como la intervención de gigantes corporativos para evitar que se lleve a cabo, los dilemas morales de los protagonistas, las dificultades que conlleva crear algo desde cero, las peleas internas y hasta pesados bloqueos mentales; todo agregando la necesaria dosis de drama que alimenta una sana curiosidad por saber cómo van a salir librados de cada situación.

Los personajes

Como mencioné anteriormente, el cerebro negociador lo tiene Joe MacMillan interpretado por Lee Pace a quien muchos recordarán por Pushing Daisies (otra serie tristemente subvalorada). Joe es héroe y antihéroe a la vez, dispuesto a hacer lo que se requiera con tal de alcanzar sus metas, muy a lo Walter White en Breaking Bad o Don Draper en Mad Men. Al rodearse de personas muy inteligentes pero con carencias emocionales, no solo se convierte en su líder, también en su principal apoyo y fortaleza. Joe está en control, y está profundamente conectado con sus objetivos. Sabe lo que quiere y va por ello.

Scoot McNairy (Argo) es Gordon Clarke, padre de familia y genio. Un ingeniero de software sumamente inteligente pero que debido a la presión por ganar un salario, se ve obligado a trabajar en ventas, desperdiciando así todo el potencial que Joe le ayuda a reactivar.  Gordon está casado con Donna (Kerry Bishé, también actriz en Argo), cuyas brillantes habilidades matemáticas y musicales le dan suficiente peso a su personaje como para destacarlo.  Ella y Gordon son el equipo perfecto en cuanto a ingenio y definitivamente no constituyen la pareja promedio de esposo y esposa.

El elemento caótico de esta ecuación es completado por Cameron Howe, representada por una actriz semi desconocida llamada Mackenzie Davis.  Desde el primer momento en que sale en pantalla, Cameron da la impresión de ser el arma secreta en la historia, una programadora brillante y problemática pero con una mente lo suficientemente prodigiosa como para que le encomienden la primera y más importante tarea para la construcción de la computadora: escribir el código de la BIOS, el componente más importante para echar a andar la máquina, sin infringir ningún tipo de copyright.  Cameron es además feminista y punk; ella escribe código mientras escucha a Bad Brains y XTC, suficiente para mí para quererla.

Un par de detalles más…

• Donna y Cameron constituyen un valor agregado para la serie, en mi opinión, pues son mujeres talentosas moviéndose en un ambiente mayormente controlado por hombres. Esto es, por demás, digno de mención tomando en cuenta la época en que está ambientada Halt And Catch Fire.

«You’re the future. Ain’t nothing scarier than that.» – John

• Los creadores de Halt And Catch Fire, Christopher Cantwell y Christopher C. Rogers, solían trabajar en el departamento de Mercadeo de Disney, diseñando estrategias publicitarias lejos de convertirse en guionistas aun cuando eran escritores en su tiempo libre. Podría decirse que esta serie es un sueño hecho realidad para ellos y eso es algo con lo que cualquier persona podría sentirse identificada.
• Halt and Catch Fire es la primera serie de la historia en publicar en premiere su episodio piloto en Tumblr el mismo día de su emisión oficial en TV, convirtiendo a las redes sociales en sus aliadas para distribución y generando así más interés en la audiencia.

Pero bueno, ¿qué significa el nombre de la serie? No es más que un eufemismo para una instrucción ficticia en lenguaje del computador que básicamente le ordenaba al CPU dejar de funcionar y, en otras palabras, destruirse.

Halt and Catch Fire fue estrenada por AMC (que ya tiene un buen historial de series como The Walking Dead y Breaking Bad) el 1 de junio de 2014 y no fue sino hasta agosto de ese año que confirmaron la emisión de una segunda temporada, para el 31 de mayo de 2015.  Por el momento en su segunda temporada, la serie parece estar atrayendo más atención y seguidores, gracias a su elenco de lujo y el magnífico estilo narrativo que ha mantenido desde el principio; definitivamente un show para mantener en el radar.