Cada vez que alguien me pide que le recomiende una serie, siempre le pregunto qué tipo de series o películas le gusta ver. Pero ahora simplemente contesto “Big Little Lies” y pienso: dichosos ellos que pueden ver los 7 capítulos en una sentada y emocionarse tanto como yo.

Parece imposible que HBO emita una serie mala. Big Little Lies no tiene muchos desnudos, impresionantes escenas de acción ni seres sobrenaturales, pero tengo que decir que hace tiempo no me emocionaba tanto una serie como esta. Un elenco de primera clase, un soundtrack fenomenal y una trama que los mantendrá sentados en la punta de la silla y contando los minutos para un capítulo nuevo.

Trama y elenco

5 mujeres, el primer día de clases del primer grado, y una investigación policial. La relación entre las mujeres, sus parejas, sus hijos y su entorno, su vida cotidiana y un asesinato, no sabemos quién murió ni quién lx mató.

Madres de diferentes generaciones con historias distintas pero con vidas que aparentan ser bastante similares, unidas por sus hijos que ingresan al primer grado. Cada personaje encaja en un estereotipo de madre: la súper mamá, la madre soltera, la madre trabajadora, etc… Los personajes aparentan vivir en una competencia un poco cliché por sus hijos y la calidad de sus vidas.

Pronto se descubre que debajo de la corteza los personajes son mucho más complejos que sus estereotipos y sus clichés, agregándole además una investigación de un asesinato en una actividad escolar.

El reparto parece solo tener nombres conocidos: Reese Witherspoon, Nicole Kidman, Shailene Woodley, Laura Dern y Zoë Kravitz como protagonistas y acompañadas de Alexander Skarsgård, Adam Scott, James Tupper, entre otros. Además, cuenta con una impresionante participación infantil que lleva una historia paralela muy influyente en la vida de los adultos.

Sin duda alguna, conocemos el trabajo de la mayoría de los actores por diferentes papeles en películas hollywoodenses, algunas mejores que otras. Pero puedo decir que estoy impresionada con el trabajo de actuación en esta serie, en especial con Reese Witherspoon (a quien asocio directamente con Legally Blonde), quien interpreta a Madeline Mackenzie, una mujer decidida, desempeñada, ingeniosa, feroz y con un sentido del humor un poco sarcástico que me encanta. Nicole Kidman interpreta a Celeste Wright, una abogada que deja su carrera para dedicarse a sus hijos gemelos, su marido Perry y su hogar. Kidman deslumbra en la pantalla y muestra verdaderamente todas sus cualidades como actriz, interpretando un personaje que aborda el tema de violencia doméstica de una forma muy objetiva y directa.

La violencia doméstica se desarrolla como una espiral, afectando mucho más allá del agresor y el agredido, y nos confronta con la realidad de que siempre puede estar más cerca de casa de lo que pensamos.

La serie no es solo sufrimiento, hay detalles verdaderamente cómicos y conmovedores. A pesar de que no posee grandes efectos especiales, tiene efectos visuales que yo percibo como una mirada dentro de las emociones de los personajes y su entorno. Lo que vemos, lo que ellos quieren que veamos y lo que sienten, lo que desearían no sentir. Estas mujeres no solo son amigas en la serie sino que también en la vida real, y no solo actúan en ella sino que también jugaron grandes papeles en la producción y dirección de la serie.  

Soundtrack

Siempre he admirado el trabajo de encontrar la canción ideal para el momento ideal, esa canción que hace al espectador llorar, reír o estar atemorizado me parece un verdadero arte. En Big Little Lies hicieron exactamente eso, la música es el conductor de las vivencias de los personajes, y así hace que el espectador perciba todo más profundo e intenso. Habrán muchas canciones conocidas pero yo más de una vez tuve que devolver un trozo de la serie para escuchar la canción y utilizar Shazam para saber su nombre. Resulta que Spotify ya había creado un playlist con el soundtrack que se iba actualizando conforme iban pasando los capítulos.

Este playlist es muy variado, lleno de nombres conocidos y otros menos conocidos, además de diferentes géneros. Desde el primer momento nos atrapa con una gran intro y la melodía de Cold Little Heart, canción de Michael Kiwanuka. Todas las canciones encajan perfectamente y conforman un playlist muy agradable que escucho con frecuencia. Aquí se los dejo:

Lo que considero importante rescatar de esta serie es la fortaleza de la amistad entre mujeres y así la fuerza de la unión entre mujeres que luchan por generar un espacio seguro para ellas y sus hijos. La sociedad ha condicionado a las mujeres a competir entre ellas y vivir en constante rivalidad, pero esta serie retrata hermosamente la profundidad y solidez que puede alcanzar una amistad femenina y el valor del apoyo y la unión entre mujeres.

El final responde las tres incógnitas mayores que se nos plantean a lo largo de la serie, y logra amarrar todo de manera altamente satisfactoria. Realmente es un episodio de infarto, muy bien construido de inicio a fin. Con ese cierre claro y conciso, está bien que funcione como miniserie. Hay rumores de que tal vez sea renovada, pero podría ser mejor que la dejen tranquila como la gran joya que fue.