La historia de Spec Ops: The Line es ejemplar, tiene una definida línea divisoria con cualquier otro First Person Shooter, no se trata solo de ganar sino de entender las terribles consecuencias de una guerra. Nuestro personaje principal, el Capitán Martin Walker conforme se desarrolla nos aleja del típico héroe de guerra americano por una persona tangible, errada y al borde de decisiones muy difíciles. El Capitán Walker es enviado a Dubai junto con un equipo de reconocimiento para valorar la situación y de ser necesario pedir una extracción de emergencia. El desarrollo es lineal, son muy pocas las ocasiones donde nosotros como jugadores podemos tomar las decisiones que pueden generar un cambio en la historia.
La compañía desarrolladora Yager Development se tomó alrededor de 3 años para presentar Spec Ops: The Line. Las visuales creadas con el Unreal Engine 3 no son particularmente excepcionales, el tiempo de carga (loading) es muy extenso para un juego que no presenta gráficas de gran calidad. Pero su falla principal cae en la mecánica de juego y la inteligencia artificial de los compañeros de juego. La mecánica se vuelve absurda, errada en momentos de alta dificultad ya que el personaje no reacciona a los comandos indicados. El sistema de cobertura y el comando para correr son ridículos, se utiliza el mismo botón para realizar ambas acciones lo cual puede resultar en nuestro personaje corriendo cuando no debe o cubriéndose cuando no debe. El movimiento de la cámara es rígido y con ángulos incómodos (me recordó mucho a Max Payne 3) y la Inteligencia Artificial con mucha frecuencia se interpone en el camino en medio de una batalla teniendo un obvio resultado catastrófico
No todo es malo con el Spec Ops: The Line, la historia es verdaderamente excepcional. A diferencia de la mayoría de juegos de guerra norteamericanos, dónde todo se trata de explosiones más grandes y ser el que gana la batalla. El Spec Ops nos muestra que para todos los involucrados en una guerra no hay un verdadero lado vencedor. Las acciones que se deben tomar pueden llegar a ser muy difíciles y a veces se pierde el norte en el compás moral que tenemos en nuestro día a día. Lo más importante es que dentro de esta compleja historia somos nosotros los que al final decidimos que significado queremos darle a las acciones de nuestro personaje principal. ¿Se hizo todo para bien o para mal?
En resumen, si lo que están buscando es un “shooter” entretenido con mecánicas de juego inteligentes que permitan al jugador adaptarse rápido y de forma sencilla Spec Ops: The Line NO es el juego para usted. Si lo que desean a pesar de las dificultades que pueda presentar el juego es experimentar una historia completa, llena de vulnerabilidades y humanismo en nuestro personaje principal Spec Ops: The Line debe estar en su lista.
¿Ya lo jugaron? ¿Qué les pareció?
