Este fin de semana pasado, tuve la oportunidad de darme una vuelta por Bogotá Colombia para disfrutar del Festival Musical Estéreo Picnic, que fue una experiencia realmente única. Acá les comparto un poco de mis experiencias (malas y buenas) con las bandas que más disfruté y todo lo que viví en esos 3 días. Si quieren saltarse mi rant por errores de organización del festival, pueden pasar al título «Lo Chiva» y si solo quieren saber de las bandas al título «La Música» 😛
PDT: Por primera vez en un concierto me dediqué más a disfrutar que a tener el cel en la mano, es por esto que aclaro debajo de cada foto los derechos de quién la tomo, sino trae nada, es mía 😀
LO MALO
Día 1:
Lastimosamente empezamos con el pie izquierdo, que nos dejó un muy mal sabor de boca de parte de la organización del festival. Para no hacer la historia más larga de la cuenta, empiezo por contarles que habían 2 grandes distribuidores de entradas: uno para nacionales (Colombia) y otro para internacionales (cualquier persona de otro país).
- Nosotros adquirimos las entradas en el distribuidor internacional, y por un problema de impresiones, no nos entregaron las entradas a domicilio, sino que después de muchos emails, chats y consultas, me dicen un día antes que las tengo que retirar en el evento en el área de acreditaciones.
- Llegamos, consulto donde queda el área de acreditaciones a una persona con una camiseta que decía «Logística» y me dice que solo hay 1 FILA para todo lo relacionada con boletas. La fila era de unos 200 mts, bajo la lluvia.
- Después de más de 1 hora de fila, llegamos al lugar y nos dicen que no, que debo pasar y adentro hay UN ÁREA DE ACREDITACIONES donde debo retirar la entrada.
- Entramos, hay un puesto con ese rótulo, después de otra media hora de fila, me dicen que no es ahí, que es en un puesto de servicio al cliente.
- Me dan las entradas, después de perder más de 2 horas de conciertos porque NADIE SABÍA NADA.
Día 3:
Llegamos y supongo que por ser sábado había bastante más asistencia que los otros días anteriores y había mucha gente que debía retirar su entrada (el papel), para luego cambiarla por la pulsera con la que se podía entrar al lugar. DE NUEVO: una fila para TODA la gente, tanto personas que tenían que buscar su entrada como los que solo teníamos que entrar porque ya habíamos pasado este proceso en días anteriores. Se presentan un montón de problemas con personas que aparentemente estaban entrando con boletas falsas y mientras la organización piensa que hacer al respecto, cierran por más de 20 min la ÚNICA ENTRADA (esto sin contar el rato que ya llevábamos haciendo fila), pagando justos por pecadores. Después de muchos reclamos de la gente que podíamos pasar directo, una de las personas de logística le dio el ayote de separar las filas.
LO CHIVA
El lugar para el festival fue el Parque Deportivo 222 (imagínense algo así como la Sabana) y a pesar de las inclemencias del tiempo (que no tenían nada que ver con la organización), un 80% del tiempo, la actividad fue increíble, el otro 20% fue increíble bajo la lluvia 😛
Al llegar encontramos distintas secciones: 3 tarimas para los conciertos (Pepsi, Tigo Music y Huawei), el Hippie Market, que era algo así como un mercado lleno de todo lo que se pueden imaginar, desde un puesto para tattoos, tiendas de ropa alternativa, tiendas con máscaras, sombreros y glow sticks para disfrutar los conciertos, hasta tiendas de parafernalia para drogas, muy open minded. Aparte de esto había una sección de comidas donde se podía encontrar un poco para cada gusto, desde negocios conocidos como Papa John’s, Juan Valdez y Taco Bell, hasta negocios locales de crepas, sánguches, parrilladas y comida alemana; suficiente para sobrevivir por los próximos 3 días.
Como siempre no podía faltar un gran área dedicada a los patrocinadores, ahí habían diversos stands de marcas como Axe, Adidas y los organizadores con juegos y lugares para sentarse. También una sección (que la meto acá porque me parece más propaganda que food court y además no estaban en el mismo lugar) donde varias marcas de licores tenían a la venta cervezas y tragos.
Mi área favorita, que fue para mi lo que envolvía el significado del «Picnic» es que pusieron muchas áreas para descansar y chillaxear con los amigos, comer o simplemente esperar por el concierto que seguía.
LA MÚSICA
Para que se den una idea de la loquera que fueron los tres días, empiezo por compartirles el line up:
Antes de empezar quiero aclarar que como ya mi novio y yo estamos muy mayores, elegimos ser muy selectos y ver solo las bandas que queríamos y no todos los conciertos, a pesar de que todo el line up era de pura calidad de exportación de todo el mundo y local. Terminar una peda a las 4 am para seguirla al día siguiente ya no es tan fácil en la tercera edad 🙁
Ahora sí, ¡un recap de lo que vi cada día!
Día 1: Of Monsters and Men
Queda decir que desde que sacaron el sencillo «Little Talks», esta banda de islandeses me empezó a intrigar muchísimo con su mezcla de indie-pop-folk y tenía muchísimas ganas de verlos en tarima. La verdad me sorprendieron más de lo que esperaba: una banda super bien montada que llevaba hasta trompetas y coristas, las voces de Nanna y Raggi fueron impecables y tan dulces, fuertes y conmovedoras al mismo tiempo, que cada canción tenía su sello único. De verdad en mi lista de recomendados para volver a ver.
Tame Impala
La presencia en escenario que tiene Kevin Parker y su banda fue uno de los highlights de este día. Los australianos nos hicieron sentir de todo con una combinación de sus lyrics, la música y los audiovisuales espaciales-psicodélicos que nos presentaron, de verdad una experiencia fuera de este mundo.
Die Antwoord
Definitivamente entre mi top del festival y el grupo que más esperaba el jueves. Moría por ver a Yolandi y Ninja en tarima y brincar hasta no poder: y eso fue lo que pasó. La energía que trasmiten es de otro mundo y a pesar que me faltó una pieza viejita (Evil Boy), de verdad que se tiraron a como pudieron casi todo su repertorio acompañados del super famoso DJ Hi-Tek que básicamente «dropped the motherfuckin’ beatbox». Yolandi como buena diva que es, se cambió de vestuario casi cada 2 canciones y la máscara de Pitbull Terrier de Ninja, fue de lo más espeluznante de la noche.
El público terminó en una masa de sudor y alegría inexplicable.
Día 2: Alabama Shakes
A Alabama Shakes los empecé a escuchar hace muy poco, el año pasado. Pero la voz de Brittany Howard nada más me enamoró perdidamente y me recuerda muchas veces a una mezcla perfecta entre Aretha Franklin y Janis Joplin, así de rara, poderosa, particular y estremecedora al mismo tiempo es su voz. Si quieren oír una de las pocas bandas que suena mejor en vivo que en los discos (y eso es mucho decir por que son impecables) no se pierdan a Alabama si tienen la oportunidad.
Howard llegó con una capa, como la reina que es y nos movió todas y cada de una de las células del cuerpo. Entre ojos nublados de la emoción, muchos coreamos (con la voz que nos salía) las canciones de esta banda.
Noel Gallagher’s High Flying Birds
No necesariamente mi «cup of tea», pero me pareció muy chiva la cantidad de edades tan diversas que alcanzó esta banda: desde chiquillos de 18, hasta varios 60tones que suspiraban por Noel.
Una puesta en escena muy buena, con rocksito clásico, que movió aún más a las masas cuando tocó un par de canciones de Oasis, incluída Wonderwall, para cerrar su presentación con broche de oro con toda la gente a coro.
Florence + The Machine
La más esperada del viernes. Florence llegó como una ninfa del bosque a la tarima: con su cabello rojo, un vestido lleno de vuelos y transparencias (tan etéreo como ella) y sus pies descalzos sobre la fría tarima (si, la amo).
La pelirroja y su incomparable ensamble: The Machine, nos hicieron brincar, bailar y cantar a grito pela’o hasta que la garganta no daba, a pesar del frío y la lluvia, que decidió que haría que esta presentación se sintiera aún más llena de naturaleza. De verdad sin palabras. Después de más de hora y media de darlo todo, la gente no paró de gritar hasta que se devolvió y nos regaló 3 canciones más. Amor puro.
Día 3: Los PetitFellas
Un grupo que no estaba en nuestra lista pero que vimos porque logramos entrar con más tiempo que los días anteriores, me pareció un gran descubrimiento y una grata puesta en escena. Los colombianos que tienen una propuesta fresquísima de Jazz y Hip hop, de verdad me sorprendieron a mi (porque era la primera vez que los oía), pero definitivamente se echaron a la bolsa al público bogotano, quienes corearon todas sus canciones.
The Flaming Lips
Probablemente la propuesta en tarima más alucinógena. Definitivamente los provenientes de Oklahoma siguen teniendo una puesta en escena fuertísima, llena de excelente música y un show lleno de psicodelia: globos gigantes llenas de escarcha, proyectiles de papelitos de colores, muñecos inflables y disfraces, miles de luces, pantallas con imágenes loquísimas y más. Se quedan cortas las palabras para describir esta presentación y de repente tenés a Wayne Coyne en una burbuja gigante flotando entre la multitud.
FUERA DE ESTE MUNDO.
Snoop Dogg
A sus 44 años, un Snoop Dogg con un puro se subió a la tarima a darlo todo. Nos puso a brincar, bailar y perrear con sus mejores éxitos y gritamos su nombre miles de veces. Cantó desde Gin and Juice, pasando por colaboraciones con Katy Perry y Pharrell, hasta P.I.M.P, y cerró con los covers de Young, Wild and Free de Whiz Khalifa y Jammin del Bob. Puro Flava!
Foto por Camilo Rozo. Tomada del Facebook Oficial del Festival Estéreo Picnic.
Jack Ü
Diplo y Skrillex cerraron el último día del festival y a pesar que tenía muchas ganas de verlos, empezaban a tocar después de la 1:30 y teníamos un vuelo mañanero que tomar y maletas que hacer, así que nos los perdimos y solo logré tomar una foto mientras montaban la tarima. 🙁
Definitivamente un fin de semana inolvidable que queremos repetir mil veces <3
