Cuando empecé a ver “It’s Always Sunny In Philadelphia” hace un par de años, no me imaginé que me estaba encarrilando a lo que ahora pienso que es una de las series más cómicas y perversas que existe en la televisión actual, ni siquiera puedo pensar en referente comparables más allá de South Park, … y tal vez.
Con el paso de las temporadas, la cosa se pone peor… ¿o mejor? … No sé. De allí mi post de hoy.
Después del episodio de anoche “The gang broke Sweet Dee” me vengo haciendo una pregunta a mí misma: ¿IASIP me ha convertido en peor persona? ¿IASIP saca la peor persona que hay en mí? ¿Y por qué me causa tanta diversión ver sufrir a la pobre Dee?
Cuando pienso en Sweet Dee no puedo evitar pensar en cuando yo era niña, y cuando trataba de jugar con mis amigos (en mi caso, los épicos Power Rangers) mi hermana menor siempre llegaba a tratar de jugar conmigo. Al final, por insistencia, la dejábamos jugar pero le dábamos la Power Ranger Morada (para quienes no conocen mucho de los Mighty Morphin Power Fucking Rangers, la morada no existe), o sea, mi hermana siempre fue la mantequilla de todos nuestros juegos.
Bueno, en el caso de Dennis y Dee Reynolds no hay que irse muy largo para entender que la relación de ellos es exactamente la misma, sin embargo, a edades maduras (¿maduras? for real?) no lo han logrado superar, entonces el juego de la “mantequilla” es perpetuo y cada episodio más cruel.
Este inicio de temporada me hizo volver a tener fe en It’s Always Sunny In Philadelphia, en mi opinión fue una apertura de temporada épica, inesperada y que logró cautivarme y entretenerme, pero al mismo tiempo me hizo sentirme mal conmigo misma.
Para quienes ya han visto aunque sea un par de temporadas de IASIP, notarán la manera en que los personajes tratan a Sweet Dee (a veces haciéndole referencias de que se parece a Big Bird de Plaza Sésamo (sí se parece), a veces tratando de dañar sus relaciones con hombres haciéndole creer que son retardados o tratando de que pierda cada granito de confianza propia que le puede quedar). Bueno, they took it too far en este episodio.
Abre con una Dee en sus últimas, comiendo queque sacado del basurero, tomando guaro y fumando, todo a la vez en Paddy’s. Como quien dice, no vale un cinco. Dee está deprimida, y “the Gang” busca soluciones, ya que ya ni siquiera responde a sus ofensas, y eso molesta especialmente a Frank. Él necesita que ella dé pelea para poder seguir ofendiéndola, sino “no tiene diversión”.
Después de este episodio me queda clarísimo que Dennis Reynolds es el personaje más sociópata de la televisión (sí, más sociópata que Dr Thredson -Zachary Quinto- en American Horror Story o que Dexter, quien al menos muestra sentimientos). Dennis es un ególatra maldito, pero de alguna manera logran que sea graciosísimo.
Por otro lado, Dee en parte merece que la traten mal. Por lo general, ella suele creerse mejor que el resto de The Gang, sigue andando detrás de ellos por más que la rechacen, no tiene auto-respeto; pero aún así creo que después de esto, yo siendo ella, me hubiera ido a vivir a Groenlandia y no hubiera regresado jamás (para no decir que hubiera considerado tirarme del Virilla 40 veces).
Este episodio me sacó carcajadas, y es por esto que tengo una disyuntiva enorme al ver IASIP: ¿Será que de verdad soy una mala persona? Ver sufrir a Dee me produce mucha risa, ver a Dennis ser un sociópata me encanta, y presenciar los chistes de The Gang contra Dee (y contra el resto de la humanidad) “me saca el menudo”. ¿Hay algo malo en mí? Por favor díganme que no estoy sola.
Extras:
En este episodio aparece Lavell Crawford (“Huell” de Breaking Bad) y el Dr. Chris Taub (Peter Jacobson) de House M.D.
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