¿Qué mejor regalo para un fandom que su serie tenga muchas temporadas sin indicios de bajar su índice de calidad? Muchas personas que conozco dejaron de lado Homeland luego de la infame muerte al final de la tercera (¿todavía cuenta como spoiler a pesar de que han pasado 4 años?). No saben lo que dejaron atrás porque la serie, gracias a sus magníficos guionistas, se ha venido reinventando con cada nueva entrega desde entonces. Y puedo afirmar, convencido, que la temporada 7 ha sido la mejor desde la Drone Queen season aka temporada 4. Se siente tan actual que hasta mencionaron el conflicto en Nicaragua en su último episodio. El compromiso que asumieron la mantiene relevante en un entorno cambiante y con tanta disponibilidad de contenido.
Conmigo lo lograron. Por casi tres meses, las semanas se me hacían largas esperando el domingo para un nuevo episodio. Eso, bajo mi ojo seriéfilo, es señal de que una serie está haciendo TODO lo correcto. Claire Danes como Carrie Mathison sigue siendo una fuerza imparable. Con cada capítulo que pasaba le lograba encontrar alguna sutileza o una capa más a su personaje, dotándola con más caracterización y evolución en una temporada que en todo el resto de la serie. Sentí su desesperación e impotencia y me alegré con sus pocos pero efectivos momentos de satisfacción. Muchos premios para ella.
Sí, desde un inicio sabíamos que ella padece de un trastorno bipolar, pero todo esto lo habían dejado un poco de lado últimamente, hasta que llegamos a la actual temporada. Al traer su enfermedad mental al ojo del huracán, pudimos apreciar a una Carrie más desaforada, más desequilibrada y ¿por qué no? hasta más humana que nunca. Los últimos 5 minutos del episodio 9, titulado Useful Idiot, me dejaron con serios problemas de taquicardia. Mis amigos redactores lo saben. Carrie siempre cae en los brazos de hombres que deberían ser inaccesibles, y esto le genera más conflicto a su ya de por sí, imperfecto personaje. Brody, Aayan y Quinn impregnados en su memoria para siempre.
A pesar de que cierto personaje parecía ser tan importante en sus comienzos, una vez que nos libramos de él, la serie tomó nuevos rumbos y se dio espacio para explorar. Uno como espectador agradece de cierta manera que la serie no se encasillara, sino que más bien se ha mantenido curiosa, buscando nuevas maneras de atrapar a su audiencia, y así convirtiéndose en uno de los mejores thrillers psicológicos/políticos de los últimos años.
Ya no es solo Carrie
Carrie y su rol de madre fueron un componente importante también en esta temporada, porque Franny ya está en edad para cuestionarse algunas cosas, como ¿dónde se iba su mamá por largos periodos de tiempo? Su tía Maggie (Amy Hargreaves) estuvo a cargo de su crianza mientras Carrie viajaba al extranjero por algún caso importante. Ahora, Carrie estuvo más enraizada y buscando cierta estabilidad, pero seguía desapareciendo en medio de la noche y comprometiendo la seguridad de su hija. Su conducta errática provocó daños colaterales y tuvo fuertes repercusiones que la hicieron abrir los ojos y a su vez, la llevaron a tomar decisiones contundentes.
Yevgeny y la conspiración rusa
Esto fue sumamente interesante de ver, no solo porque Costa Ronin es Oleg en The Americans (actualmente emitiéndose su sexta y última temporada) sino porque hay mucho complot/espionaje ruso en mi TV y me encanta. La persecución a Simone Martin (Sandrine Holt) y quien realmente estaba detrás de la muerte del General McClendon (Robert Knepper) fue una buena manera de crear ese enganche a lo largo de los 12 episodios. Lo que menos me gustó fue la presencia de Brett O’Keefe (Jake Weber) el host de TV con opiniones tajantes y provocadoras, pero por dicha eso se acabó rápido, como si nos estuvieran leyendo la mente y complaciéndonos a la vez. Inclusive me terminó agradando la presidenta Elizabeth Keane (Elizabeth Marvel) y me dio pesar cuando todos a su alrededor querían llegar a destituirla.
Volviendo a mi idea del párrafo inicial, Homeland es de esas pocas series que podrían seguir y seguir sin problema, porque ya lograron desarrollar la fórmula ganadora. Aun así, la misma Danes anunció en estos días que la octava temporada será la última y además habrá un time jump importante. Tengo sentimientos encontrados con esta noticia, pero así como los guionistas han sabido ingeniárselas para mantenerse a flote, estoy seguro que nos darán un cierre memorable bajo los estándares que ya le conocemos a esta espléndida serie.