Durante el 2017, Netflix nos trajo 48 series nuevas (contando las infantiles y los documentales). Llega un punto en el que puede llegar a ser demasiado, pero hay que ser selectivos. DARK, la más reciente y grata sorpresa, es su primera serie original alemana. Con un catálogo conformado por The Crown (primera serie original británica), Suburra: Blood on Rome (primera serie original italiana), 3% (primera serie original brasileña), Marseille (primera serie original francesa), Club de Cuervos (primera serie original mexicana) y Las chicas del cable (primera serie original española), cada vez va apostando por más contenido internacional como parte de su estrategia para llegar a un mercado global.

Co-creada por Baran bo Odar y Jantje Friese, en esencia, trata acerca de cómo las vidas de los habitantes de Winden, pueblo boscoso en donde parece que llueve todo el tiempo, se intercalan de maneras inimaginables. Es una de las que sí valen la pena.

Para los seguidores de series como la francesa Les Revenants (por el tono sombrío y misterioso), Twin Peaks (por la cantidad de personajes que se intersectan en un pequeño pueblo), o más recientemente, Stranger Things (por sus casos de desaparición y alusión a lo ochentero), esto es para ustedes. Y aseguro que hasta la van a disfrutar más que esta última, ya que es mucho más madura y menos “diluida” para todo público. Además posee una carga mucho más melancólica que nostálgica, y luego de unos episodios, lo que tenía en común se va apagando, llegando a tocar temáticas distintas.

Nos remite al cine nórdico con una estética y cinematografía pesada, sin hacer mucho alarde de la paleta de colores, pero que resulta efectivo para el tipo de historia que se está contando. Quizás la frialdad que le es característica también se remonte a la cultura alemana, por lo que no vamos a ver mucha demostración de afecto, mas esto no es indispensable para que la serie vaya ganando notoriedad.

Cuatro familias a lo largo de 66 años

Nielsen – Ulrich Nielsen está casado con Katharina y tienen tres hijos, Magnus, Martha y Mikkel.

Doppler – Charlotte Doppler está casada con Peter y tienen dos hijas, Franziska y Elisabeth.

Tiedemann – Regina está casada con Aleksander y tienen un hijo, Bartosz.

Kahnwald – Hannah es viuda (el suicidio de su esposo, Michael da rienda suelta al relato en la primera escena de la serie) y tiene un hijo, Jonas, quien también es nuestro protagonista.

Ya que hay tantos personajes y se puede tornar confuso darle seguimiento a todas las sub-tramas, hice un árbol genealógico más completo para facilitarles el visionado.

En Winden, la desaparición del joven Erik parece lo más inusual que ha ocurrido en años, pero todos desconocen que él será tan solo el primero. Los animales caen muertos, las luces comienzan a parpadear, y los residentes más antiguos concuerdan que algo “está volviendo a suceder”, sea lo que sea que esto signifique. La planta nuclear del pueblo alberga secretos y enigmas detrás de sus rejas y se mira imponente, atrás del follaje, llegando a arruinar el paisaje denso y frondoso. Resulta que hay un túnel en la cueva donde ocurren las desapariciones, conectando por debajo con esta planta nuclear, originando quizás un portal.

Al mostrar el vínculo entre pasado y presente (2019), por medio de evidentes fotografías y brincos al pasado (exactamente 33 años atrás, al año 1986 y más atrás, a 1953), nos damos cuenta que los personajes crecieron para olvidar sus promesas de jóvenes. La ingenuidad que albergaba dentro de sí mismos se transformó ahora en apatía y desdicha, viéndose además incapaces de alejarse de Winden. A pesar de los años, los adolescentes de 1986, ahora adultos, decidieron hacer su vida ahí mismo. Ulrich y Charlotte son oficiales de policía, Katharina es la directora del colegio, Hannah es masajista y Regina es dueña del único hotel. El pueblo no los suelta, o ellos no sueltan al pueblo.

Hay muchos voice-overs donde se filosofa acerca de viajes en el tiempo, simbolismos con el número 33, el momento en que los ciclos lunar y solar coinciden, y la triquetra (símbolo en el cuaderno de Noah). “El pasado no solo influencia al futuro, el futuro también influencia al pasado”.

Construcción temporal bien hecha

Es una serie para poner atención (más si dependes de los subtítulos para entenderlo todo). Esa es otra, no la vean en otro idioma que no sea el original. Los doblajes suelen arruinar la inmersión. Las historias de viajes en el tiempo no son fáciles de ejecutar, y el resultado final puede llegar a ser pobre si no se respetan las reglas internas pre-establecidas.

La línea de tiempo fija implica que aunque viajes al pasado para intentar cambiar algo, es imposible que esto afecte a tu presente. Las maneras en que intervengas llegarán a formar parte de la historia misma, sin mayor consecuencia.

En una línea de tiempo dinámica, los eventos alterados en el pasado poseen un impacto definitivo en el presente. De esta manera se crean paradojas, como cuando al modificar algo, evitas tu propio nacimiento, por ejemplo.

Cuando hablamos de multiversos, nos referimos a líneas de tiempo alternas y universos paralelos. Lo que alteres, tendrá repercusiones tan solo en la nueva línea de tiempo creada. Algo muy importante: volver a la línea de tiempo original costará más trabajo de lo imaginado.

Todas los podemos evidenciar en distintas series y películas. Para DARK, lo que más se acerca es la línea de tiempo fija, sin entrar en mucho detalle.

Edición de sonido + un soundtrack formidable

La manera en que se editaron los efectos de sonido puede resultar más invasiva de lo común, llegando a aportar a algunos o a molestar a otros. Algo sí es seguro, logran generar tensión previa a momentos de sobresalto. Por otro lado, el soundtrack es de los mejorcitos que he escuchado este año en televisión, desde la canción de intro, Goodbye de Apparat o piezas de Fever Ray y Agnes Obel en los momentos apropiados. Aquí se los dejo:

Con mínima publicidad por parte de Netflix, desde ya puedo estar seguro que será de esos éxitos silenciosos que dará mucho de qué hablar. Descúbranla.