Ayer vivimos la experiencia de Rogue One: A Star Wars Story y lo primero que he de confesar es que se sintió más familiar que Force Awakens porque viene de un universo que ya habíamos vivido, con más caras conocidas y un montón de odas bellísimas a la primer (y única) saga del maestro Lucas.
Si todavía no están seguros como se mezcla Rogue One en todo el universo de Star Wars o en que parte va esta historia, les comparto mi explicación gráfica favorita de los grandes de Pictoline 😛
O esta otra si quieren hilar más pequeñito:
A partir de este momento se vienen SPOILERS para los que no han visto la peli, así que los invito a regresar otro día si no quieren que les arruine alguna sorpresa o continuar si no les importa o quieren saber que tan buena está antes de darse la vuelta por el cine.
****
S
P
O
I
L
E
R
S
***
7. Las caras conocidas de la Rebelión
No hay duda que fue el primer momento en que los fans suspiramos y pusimos los ojos como guayabas, y es que volver a ver caras como las de Bail Organa y Mon Mothma, ambos interpretados por los mismos actores de la segunda saga: Jimmy Smiths y Genevieve O’Reilly respectivamente, nos provoca muchos sentimientos.
O el más famoso Mon Calamari de nuestros corazones: el Almirante Ackbar con todo un nuevo look:
También para los que han disfrutado de los universos paralelos al mundo cinematográfico, Saw Gerrera no es una sorpresa: un personaje bastante protagonista en el papel de la rebelión en la serie animada Clone Wars. Lo vemos por tan solo unos momentos, pero la presencia del icónico actor Forest Withaker nos dio una muy buena impresión.
6. La estética setentera
Una de las cosas que más nos hace sentir en presencia de una peli muy parte de este mundo de las galaxias pero que además le trae buenos recuerdos a los fans más viejitos, es el uso de una estética sumamente similar a la de los episodios 4, 5 y 6 pero renovada al 2016. Un claro ejemplo:
Pero no es solamente el look and feel de las escenografías y todas las referencias a New Hope que vienen, sino también la concepción de los personajes nuevos: tienen este mismo mindset rebelde y 100% en causa de proteger nuestro universo de las fuerzas oscuras. ¿Y que tal la oda a los bigotes y patillas 70eros? <3
5. El regreso de la aspiradora de Darth Vader y los otros malitos
Darth Vader es sin duda uno de los personajes más icónicos del mundo de Star Wars y probablemente de los más fácil de identificar cuando pensamos en cualquiera de las sagas. El año pasado no pudimos evitar momentos llenos de sentimientos a ver el casco destruido en The Force Awakens, un momento memorable sin duda, pero este año en Rogue One volvemos a ver en unas pocas escenas al mismo Sith Lord en pleno apogeo de sus aires de dominación galáctica y no hay que negar que escuchar la voz de aspiradora de James Earl Jones nos pone la piel de gallina.
Para esta entrega tuvimos un par de caras nuevas y viejas en el lado oscuro y es que no cabe duda que uno de los momentos más comentados fue la resurrección en CGI de Grand Moff Tarkin, interpretado en la saga original por Peter Cushing y quién falleciera en 1994. El incluir a este personaje no fue solo un punto estético y de continuación muy fuerte en la cinta, sino que también fue una muestra de los grandes avances tecnológicos que siempre se han usado en estas películas.
La cara nueva fue el Director Orson Krennic, quién nos presenta una cara distinta de los villanos que hemos visto en Star Wars: su principal motivación es la fama y su crecimiento dentro del Imperio. Rogue One nos presenta ya un Krennic derrotado por sus errores del pasado (pueden ver un poco más de la historia en el libro precuela Rogue One: Catalyst o en resumen acá) y quién definitivamente solo desea que la Estrella de la Muerte por fin funcione.
4. Un nuevo robot al cual amar: K-2SO
Star Wars se ha encargado que por muchísimos años 2 robots se robaran nuestro corazón y es que no se puede negar que C-3PO y R2-D2 son los amigos mecánicos más carismáticos de la pantalla grande.
En The Force Awakens nos topamos una sorpresa muy agradable con la presentación de BB-8, quién se volvió un personaje adorable para nuevas y viejas generaciones de fans y esta entrega no podía ser la excepción.
K-2SO y de cariño «K» no solo empezó su interpretación con el pie derecho, sino que sus intervenciones definitivamente nos dieron el toque cómico en una película bastante oscura y triste en este universo. Se ganó nuestro cariño super rápido y su inteligencia y sarcasmo fueron la cereza en el pastel que fue el utilizar la voz de Alan Tudyk.
3. Riz Ahmed y su papel como el piloto insurrecto
Yo conocí a Riz Ahmed este año en la miniserie original de HBO The Night Of, y de verdad el papelazo que se hecha es de otro calibre y esta vez en Rogue One no fue la excepción: nos regaló un personaje conflictuado por sus errores del pasado, multifacético, con muchas capas de desarrollo y que a la vez no roba completamente el protagonismo hasta el final con su acto heroíco.
2. Diego Luna, la representación latina y un cast diverso
Un punto altísimo para rescatar acá es el cast diverso: obviamente esto no ha sido un problema nunca en Star Wars, y desde el inicio, a pesar que los 3 personajes principales de la saga original: Leia, Luke y Han y los 2 personajes más fuertes de la segunda saga: Anakin y Amidala son muy blanquitos y gringuitos, siempre tuvimos actores con looks distintos, entre ellos Bail Organa, Lando Calrissian y Mace Windu y más recientemente protagónicos de Finn y Poe Dameron y apariciones secundarias del Admiral Statura, Tasu Leech y Razoo Quin-Fee en The Force Awakens.
Rogue One no fue la excepción, pero fue aún más allá con un cast PROTÁGONICO racialmente MÁS diverso, y es que no solo Diego Luna, un latino como personaje principal, sino que también nos dieron a Chirrut Îmwe y Baze Malbus (asiáticos), a Saw Gerrera (afroamericano) y Bodhi Rook (pakistaní), todos robándose la pantalla grande con increíbles papeles. De verdad puntos que sigue ganado la franquicia para que todos los fans nos sintamos de alguna manera representados en una saga tan importante y con tantísima exposición.
1. Jyn Erso: Otra female lead empoderada
Star Wars siempre nos ha vendido la idea que podemos ser princesas y bad-asses al mismo tiempo, y es que desde la mismísima concepción de Leia nos dan a todas las chicas un personaje a quien admirar. Con la segunda saga sentimos lo mismo con Amidala y es algo que se ha mantenido a través de todas las entregas, sin embargo The Force Awakens y Rogue One marcaron una pequeña gran diferencia: las chicas son los personajes principales y no solo un papel de segundo plano, parte del cast protagónico o parte de la historia, sino que son LA HISTORIA y por quienes se mueve la película.
A la peli en general le doy un 9.5 de 10, mismo puntaje que le di a The Force Awakens, y es que son películas realmente buenas, con escenografía impecable, cast increíble e historias profundas. Ambas también se unen al universo Star Wars de una manera tan suave y fácil que de verdad los fans lo disfrutamos demasiado. ¿Que si me gustó más que The Force Awakens? Si, bastante más, pero definitivamente una no le quita méritos a la otra.
¿Qué les pareció?
