Por lo general, suelo amar las películas sobre temas adolescentes. Esas películas que nos hacen viajar en el tiempo y nos recuerdan lo mucho que (¡gracias a Jebús!) hemos crecido y aprendido en el camino. Nos encanta vernos reflejados en ciertos personajes, entenderlos, ponernos en sus zapatos; volver la vista a otros personajes y darnos cuenta de que alguna vez los conocimos: al bully, a la porrista, al nerd que al final del día se convirtió en el más exitoso de la clase – a pesar de haber sido constantemente reprimido por sus pares.
En fin, para muchos la etapa del colegio fue un momento escalofriante que desearían borrar de sus memorias -conozco mucha gente que tiene pesadillas recurrentes sobre esta traumatizante fase de vida; en mi caso, mi ciclo de secundaria fue quizá uno de los momentos que más aprecio de mi corto (mediano) paso por este mundo, por lo buenos y los malos momentos, por lo que aprendí y lo que viví, y lo que me hizo quien soy hoy. Por eso, hoy quiero compartir con todos ustedes algunas de mis películas favoritas que involucran colegios: esas instituciones saturadas de hormonas, juegos de poder e importantes micro sociedades.
1. Romy & Michelle High School Reunion (1997)
Ok. Si la han visto, lo sabrán. Romy White (Mira Sorvino) y Michelle Weinberger (Lisa Kudrow) no son exactamente adolescentes (al menos no en edad) en el contexto en el que se desarrolla la película. Sin embargo, como mucha gente, nunca lograron superar por completo la traumática fase que significó su socialización en secundaria.
Una, Romy, conocida por ser la “gordita” del dúo dinámico, enamorada perdidamente del idiota pero «guapo» y popular jugador de fútbol que nunca le ha puesto ni dos segundos de su mirada encima (¿quién no ha estado en esa posición?). La otra, Michelle, con un gusto por la moda algo particular y excéntrico (aplausos) y su “no tan a la moda” aparato para corregir su espalda, con su fan enamorado Sandy Frink (el nerd más exitoso de la generación). 10 años después de salir del cole, las inseparables amigas (que siguen viviendo juntas) tratan de darle un vuelco a su vida para pretender ser quiénes no son, e impresionar a todos aquellos a los que una década después dejarían con el pico cerrado.
Una hilarante y divertida comedia de los 90s que jamás aspiró a un Óscar (a pesar de contar con Sorvino –ganadora el Óscar por «Mighty Aphrodite«) pero que definitivamente nos dejó un recuerdo imborrable en nuestros corazones cinéfilos.
2. Heathers (1988)
Veronica Sawyer (Winona Ryder) es una de las chicas más populares del colegio y sin necesariamente querer hacerlo, forma parte de las “Heathers”: un grupo con otras tres chicas llamadas de la misma manera: “Heather”. Las “Heathers” son las amigas de Veronica, pero en el fondo realmente las odia con toda su alma.
En un momento, Veronica se ve atraída por el típico forastero rebelde nuevo del colegio: peligroso, malo, inteligente y guapo; su nombre: Jason “JD” Dean (Christian Slater)(Haciendo un «revival» con Mr. Robot). JD tiene un pasado violento que lo ha hecho moverse de colegio en colegio, ya que, en sus propias palabras:
“No importa el colegio, las personas siempre son exactamente las mismas”.
Junto a Veronica, JD empieza a tomar justicia por sus propias manos, a vengarse de los bullies homofóbicos y las populares Heathers.
3. Napoleon Dynamite (2004)
Una de mis películas favoritas del universo. Napoleon Dynamite (protagonizada por Jon Heder) además de ser una comedia realmente incómoda, “coming of age», al mejor estilo de MTV de principios del 2000, fue extremadamente memorable por la redención del simpático (a veces antipático y sin sentido) nerd (al mejor estilo de La Venganza de los Nerds).
A pesar de empezar como una película casera, Napoleon Dynamite se ha convertido con el tiempo en un ícono de nuestra generación. Napoleon es un estudiante de secundaria en Idaho, que vive con su abuela, su hermano Kip y la mascota de su abuela, una llama llamada “Tina”. Tras una de las tantas aventuras misteriosas de su abuela en un viaje de motocross, el tío Rico llega a cuidar de los dos chicos. Napoleon es simpático y a la vez malhumorado, un espécimen extraño e incómodo, sin embargo, un excelente amigo y definitivamente, el mejor bailarín.
A pesar del constante bullying que recibe de sus compañeros, en parte debido a sus mentiras, sus destrezas en el arte y su intenso trabajo en el club de Happy Hands, Napoleon al final -como en Romy y Michelle- les da a todos su merecido. Un twist inesperado.
4. Welcome to the Dollhouse (1995)
La película escrita y dirigida por Todd Solondz nos presenta como protagonista a Dawn Wiener (Heather Matarazzo) o mejor conocida en el colegio como “Weiner Dog”. Una chica tímida y nerd de secundaria que toca el clarinete. Su hermano mayor es otro nerd, que crea una banda de garaje con sus amigos y un tipo popular de secundaria (de quien Dawn, obviamente, se enamora) y su hermana menor es una niña preciosa y alegre que suele bailar alrededor de todos con una sonrisa y un tutú. Dawn la odia.
Dawn y su mejor amigo (afeminado) Ralphy tienen un club en el patio trasero de Dawn, el “Club de la Gente Especial”, lo cual no ayuda mucho a la ya de por sí machacada reputación de Dawn.
que tiene una vida colegial horrenda, donde los niños del colegio le graffitean el locker, le dicen “lesbiana” y hasta es acosada sexualmente por un bully. Una historia comiquísima, y a la vez irónica y triste ¡Pobre Weiner Dog!
5. The Breakfast Club
Esta película de culto adolescente de 1985 es un must en la lista, así como otras películas de John Hughes como Ferris Bueller’s Day Off cuya trama y contexto es genuinamente adolescente. The Breakfast Club cuenta la historia de 5 chicos, cada uno representando el cliché de su generación en secundaria, durante un sábado de “castigo” o “detención” en el colegio. A medida que los chicos, todos muy diferentes entre sí, pasan el tiempo juntos, se van dando cuenta de que son seres más profundos de lo que sus clichés representan y empiezan a formar una relación de semi amistad (y un poco más que ello).
Los críticos actualmente la consideran una de las mejores películas de escuelas secundarias que existen, y el motivo es clarísimo. Considerando además el épico final sonorizado por Simple Minds con “Don’t You (Forget About Me)”: nuevos romances, y la salida gloriosa alzando el puño de John Bender.
“Cada uno de nosotros es un nerd, un atleta, una princesa, un caso perdido y un criminal”
6. Mean Girls (2004)
Una obra clásica de la comedia del 2004 de la genial guionista y comediante Tina Fey, protagonizada por Lindsay Lohan, Rachel McAdams, Amanda Seyfried y Lacey Chabert.
Después de vivir 12 años en Africa, Cady (Lindsay Lohan) va por primera vez a sus 16 años al colegio, donde conoce de entrada a Janis y Damian, dos forasteros de la secundaria quienes le explican la jungla social del colegio, y las diferentes tribus que coexisten en el terreno, entre ellas: “Las Plásticas”: Regina George, Rachel Weiners y Karen Smith.
Cady se enamora (una vez más) del chico más popular y guapo del colegio (el novio de Regina George, Reina de Las Plásticas) y mientras se adentra a tratar de boicotear al grupo de las chicas populares convirtiéndose en una de sus amigas de manera falsa, con el paso del tiempo se va dando cuenta que el poder de ser una “fake mean girl” la ha convertido en una real: Una persona horrible.
Esta película además incluye baile de graduación, fiestas, abuso de alcohol adolescente, vómito consecuente. Imperdible.
7. The Perks of Being a Wallflower (2012)
The Perks of Being a Wallflower (o “Las Ventajas de ser invisible”, en español) es una película basada en la novela de 1999 del autor estadounidense Stephen Chbosky, que más tarde en el 2012 sería adaptada a la pantalla grande, con las actuaciones del magnífico Ezra Miller, Emma Watson y Logan Lerman, como “Charlie”; un chico introvertido pero muy inteligente de primer año de colegio, tan aislado que termina haciéndose amigo de su profesor (Paul Rudd).
Después de un tiempo, Charlie se hace amigo de Patrick (Ezra Miller) y su hermanastra Sam (Emma Watson), de quien el chico se enamora perdida y platónicamente.
Patrick y Sam lo empiezan a introducir a su grupo de amigos, y por ende a nuevas aventuras que le alivian el ánimo, después de confesarles ciertas situaciones tristes y desafortunadas que han marcado su vida, y que se van revelando durante el desarrollo de la película.
The Perks of Being a Wallflower representa de manera ácida y brutalmente honesta la sensación de ser adolescente: sentir que no se pertenece, perder y ganar amigos, enamorarse de la persona correcta en el momento equivocado, ser rechazado, no controlar las hormonas, la depresión, la homofobia y secretos rudos y dolorosos que los adolescentes pasan. Yo lloré mucho y seguidamente compré el libro. Agreguemos además la musicalización: «Heroes» de David Bowie: «We are infinite» <3