Tim y Eric: Son quizás los nombres menos conocidos de la comedia actual: si uno menciona sus nombres en alguna conversación social, lo más seguro es que nadie sepa exactamente de quién se está hablando (a excepción de Eric Wareheim, que con su reciente aparición en Master of None ha llegado a tener una mayor exposición de la que nunca llegó a soñar).

Pero no hay que equivocarse: detrás de estos jóvenes (sí, jóvenes: comenzaron sus carreras con 26 años, actualmente tienen 40) hay toda una generación de comediantes gringos que se ha nutrido, y que se sigue nutriendo, de lo que es quizás la revolución más grande en comedia audiovisual en los últimos años.

Tim Heidecker & Eric Wareheim se conocieron en Temple University, ambos siendo estudiantes de cine. Aunque nadie daba un peso por ellos (después de todo, sus producciones eran de un corte muy malo y barato) tuvieron el coraje y la visión para saber que su estilo era único e irrepetible.

Hicieron su página web http://www.timanderic.com en el 2002, donde subieron sus trabajos y armaron una rudimentaria plataforma de distribución de DVDs. Al poco tiempo  Bob Odenkirk (Breaking Bad, Mr Show with Bob and David) recibió una copia con el piloto de lo que sería su primer programa: Tom Goes to the Mayor.

TOM GOES TO THE MAYOR

Tom Goes To The Mayor impactó a Odenkirk al punto en que él y su productora convencieron a la nueva sección de Cartoon Network llamada Adult Swim, para desarrollar una primera temporada.

Protagonizada por Tim & Eric, el programa era algo que no se había visto nunca en televisión: un alcalde en “Middle America” lidia, episodio con episodio, con un nuevo residente que tiene las mejores intenciones para hacer de Jefferton un mejor lugar.

Narrado simplemente con “voice acting” y fotografías, su animación era cruda y su actuación mala, pero tenía características que los distinguíría al dúo por siempre: el surrealismo, el ritmo extraño de la edición, y la sátira del mundo actual.

El primer capítulo puede verse aquí.

Viendo en retrospectiva Tom Goes To The Mayor, se puede ver claramente que era más un programa de Eric que de Tim. Las líneas narrativas cerraban, la animación, aunque cruda y poco llamativa, tenía un sentido de trash estilizado.

La gente amó y odió el programa: una característica que sería constante en ellos. Tim y Erick nunca se quedan a medias.

Después vendría el proyecto que los llevaría a la fama y que, paradójicamente, los llevaría a distanciarse cada vez más: Tim & Eric Awesome Show, Great Job!

Tomado de las pesadillas de la televisión local, Tim y Eric supieron desde un inicio que esta tenía que ser su carta de presentación. Y esa carta de presentación tenía que ser extrema. Su edición es perfecta. Su estilo es trash puro. Tim & Eric es de esos programas que logran estilizar la basura y burlarse de la cultura local y los comerciales al mismo tiempo.

Una mezcla de Andy Warhol y Jhon Waters , es lo que Tim y Eric lograron con este programa. Malos actores, malos guiones, Tim y Erick se elevaron en la llama de la anti-comedia.

El saber que algo es gracioso solo porque tiene que ser gracioso nunca fue suficiente para ellos. Ellos querían más. El programa fue planteado como un reto y un viaje ante el espectador, y, sobretodo, como un matamoscas ante la gente que buscaba solamente sentarse frente a la tele y oír risas enlatadas.

Y es ahí donde Hollywood comenzó a notarlos. Will Forte, Maria Bamford, Zach Galifianakis, Jeff Goldblum, Jhon C. Reilly… todos comenzaron a entender que este dúo estaba haciendo cosas especiales.

Si hasta Saturday Night Live comenzó a robarse sketches y a jugar con la idea de la anti-comedia (solo basta con ver los digital shorts de Andy Samberg para darse cuenta de que el estilo gráfico y la edición son prácticamente idénticos).

Lo cierto es que el programa nunca dio disculpas por la manera brutal en que se presentaba. Y eso, crea culto.  Odio y amor: es así la manera de Tim y Eric.

Los muchachos siempre supieron que estaban en un medio que lo que busca es la permanencia de caras bonitas y tramas mediocres, y eso fue precisamente lo que no dieron nunca.

Los actores de sus sketches son gente real de Los Ángeles, que no entienden bien el ritmo, el corte, nada de lo que caracteriza un programa. Y lejos de hacer eso una falla, se convirtió en un distintivo del programa: la edición favorece esos momentos, lleva los cortes al extremo, justo antes de que uno pueda decir no más, ellos lo cortan y saltan a un lugar completamente diferente.

Aquí una lista de los 10 sketches más raros del programa.

TIM & ERIC’S BILLION DOLLAR MOVIE

Después vino la película: Tim & Eric’s Billion Dollar Movie. La película en sí misma es una burla al sistema estadounidense de producir películas. Y es una basura. Pero una basura excelente. Esa es la cosa con ellos dos: hay que saber tener mal gusto. (Jhon Waters lo ha dicho en repetidas ocasiones)

Después de esto, o en medio, los caminos de ambos comenzaron a separarse. Tim siguió su cruzada del anti-humor, un humor que se basa en no dar respuestas ni chistes fáciles al público. (Gregg Turkington, autor del alter ego Neil Hamburger, una reinterpretación del Tony Clifton de Andy Kaufman es su compañero en esta aventura) Y está comprometido cien por ciento con esto. Solo basta con ver On Cinema con Tim y, un programa de review de pelis que lo último que hace es hacer el review de las películas en cuestión; y Decker, un programa para Adult Swim sobre el agente especial Jack Decker, un agente de la CIA que tiene que salvar a un presidente inepto.

Por su parte, Eric ha llevado una ruta de trabajo más convencional: comerciales para Old Spice (los de Terry Crews)

Videos para bandas como Major Lazer y Beach House, Charlie XCX, Blonde Redhead…

…Y Master of None, donde es co protagonista con Asis Anzari e interpreta al mejor amigo de éste. Una combinación única:

Ambos ocasionalmente se reúnen para hacer proyectos juntos, aunque ahora trabajen más del lado de la producción con su productora Abso-lutely. Tim & Eric Bedtime Stories, The Zone Theory (un libro de autoayuda espiritual levantado completamente de la cientología) y del lado de la producción: The Andre Show y Jack Mulalally.

Aunque sus nombres sean desconocidos, es indudble que ellos son la fuente de inspiración oculta de la nueva generación de comediantes de Hollywood y por esto, su estilo  perdurará por siempre.