Buscando la superación en la vida… Chip Baskets

Soy aficionado del humor crudo e incómodo y siempre que puedo escudriño para encontrar algo nuevo para morirme de risa. Por esto, voy a hablar acerca de dos de mis más recientes hallazgos: Baskets y The Increasingly Poor Decisions of Todd Margaret.

¿Por qué las dos series juntas en un mismo artículo? Pues siento que existe suficiente correlación entre ambas series, especialmente en el enfoque tragicómico en el que presentan a sus protagonistas. Sin embargo, su gran distinción es la manera en que ellos se desenvuelven ante las circunstancias de la vida. Uno hace todo para mejorar su situación actual, mientras que otro genera su mala suerte a través de su comportamiento errático. 

Para los fervientes seguidores de Louis C.K., sabrán que este ha sido un año muy productivo para su trayectoria. Creó y estelarizó en Horace and Pete [más de ella por acá] y en Baskets, trabajó como productor ejecutivo, junto con Jonathan Krisel y Zach Galifianakis.

Baskets nos presenta al Sr. Galifianakis en un papel doble como los gemelos Chip y Dale (¡JA!). Algo importante que quiero recalcar, es que hay que desasociar la imagen absurda que tenemos de Galifianakis por sus papeles en cintas como The Hangover, Due Date, etc. Estas son ligas mayores, demostrando sus dotes como actor dramático, y con matices de humorista cínico. Las secuencias de slapstick o comedia física son especialmente memorables en el show.

Chip estuvo estudiando en una prestigiosa academia de payasos en París, pero luego de fallar en obtener su título vuelve a su natal Bakersfield, California [como pez que vuelve al agua] junto a su nueva esposa francesa, Penelope (la cantante Sabina Sciubba). Su gran problema es que ella sólo se casó con él para obtener la visa americana, y él realmente la ama.

Estando en Bakersfield, Chip comienza a trabajar como payaso de rodeo, y quiere que lo empiecen a llamar Renoir el payaso. Algo sumamente singular es que la madre de los gemelos, Christine Baskets, es representada por el cómico de stand-up, Louie Anderson [del show animado Life with Louie]. Al principio yo no entendía nada, pero resulta ser que su papel será uno de los más recordados y de los más trascendentales.
Martha (Martha Kelly), “amiga” de Chip, es muy singular. A pesar de su tono de voz monótono, dice que sí a todo y es excesivamente amable. Gracias a esto, se aprovechan de ella en más de una ocasión. El otro personaje al que le da vida Galifianakis es Dale, y puedo prometer que se les va a olvidar que es el mismo actor. Dale tiene su vida en orden, o así lo aparenta [está casado con Patrice de HIMYM, DAMN IT PATRICE!]. Inclusive el tono de voz de ambos es distinto.

Los escritores son muy pragmáticos a la hora de establecer a Chip, alienado en un mundo que no lo comprende. Él no quiere tener una vida común y corriente, por más que el universo dicte lo contrario. Es artista y quiere aspirar a hacer algo relevante en la vida, quiere ser escuchado, pero lamentablemente la presión mundana y los acontecimientos impredecibles obstaculizan su cometido. De repente puede percibirse como una alegoría a lo que muchos sentimos a ratos, ¿cierto?

En tan solo diez capítulos, sus personajes tuvieron suficiente caracterización y esto lo considero un triunfo. Empecé dudoso, pero terminé convencido de que acababa de ver algo experimental y muy profundo. Cuando un programa logra transmitir alguna emoción a su audiencia, quiere decir que algo hizo bien. Para muchos será un gusto adquirido, pero denle la oportunidad.

Cuando uno destruye su propia reputación… Todd Margaret

David Cross crea The Increasingly Poor Decisions of Todd Margaret y la estelariza [¡qué multifacéticos están los artistas últimamente!]. Todd Margaret es enviado a Londres para vender una nueva bebida energética como parte de una compañía.
La serie funciona como una comedia de errores, muy a lo Tobias Fünke en Arrested Development. Así como su título lo indica, Margaret posee algo más que poco tacto a la hora de tomar decisiones. Es un mentiroso patológico, siendo sus mentiras cada vez más disparatadas. Nosotros somos cómplices de esas mentiras, y cada vez que inventa algo nuevo para salirse de algún problema, no aguantamos la pena ajena.

Miente diciendo que creció en Leeds, que su padre está muerto, miente también acerca de su experiencia laboral, en fin, casi acerca de todo. Conforme avanza la serie, cava un hoyo cada vez más profundo. Es un completo ignorante de las costumbres inglesas, y cuando conoce a Alice Bell (Sharon Horgan), tiene un crush fuertísimo hacia ella, y (según él) para enamorarla miente todavía más. Alice es aficionada a la gastronomía molecular e inventa unos platillos muy extraños. Por otro lado, tenemos a Brent Wilts (Will Arnett – reciente protagonista de la desencantadora Flaked) el profano y abusivo superior de Margaret [cuya vida también es un engaño].
La tercera temporada estrenada este año, resulta ser un sueño dentro de un sueño, como un mundo alternativo al ya establecido en las primeras dos.

Claro está que esta serie tiene una energía diferente a Baskets, aludiendo a un humor más extravagante y pesado [recuerda un poco a Always Sunny y a Arrested Development, sin duda]. Pero, al punto al que quiero llegar es que todos estamos en el mismo barco, y podemos tomar la decisión de ejercer control sobre nuestras decisiones, procurando ser transparentes en el proceso y haciendo lo mejor posible; o podemos auto sabotearnos cada día más, darnos por vencido y deprimirnos. Es agradable pensar que a través de la televisión se puede llegar a esta clase de reflexiones.