Por Sergio Beeche Antezana
Hay distintas maneras de ser reconocido en la industria del cine. Con nombres consagrados por sus logros y excelentes interpretaciones a través de los años, muchos de los mejores actores y actrices de hoy en día apenas tienen trabajo por sus restricciones de edad en papeles que ahora no son apetecidos por los estudios. El constante cambio de imagen y volatilidad de lo que es importante resulta cada vez más evidente en las películas actuales, por lo que es aun más común ver que alguien es escogido por su belleza física que por sus dotes actorales; pocos encuentran constancia en ese trabajo tan exigente en aquello que venderá más producto.
Por suerte, sí hay ejemplos que se pueden rescatar no porque tuvieron algún escándalo o porque ganaron un premio y al instante fueron olvidados (cosa que sucede mucho con actores y actrices que ganan el Oscar), sino con inteligencia a la hora de elegir sus papeles y porque son escogidos gracias a su excelente madera para convertirse en intérpretes frente a la cámara, serios y con un futuro que sea digno de poner atención. Entre varios nombres, el de Oscar Isaac es quien salta a la mente estos días. Con 36 años, Óscar Isaac Hernández Estrada nace en Guatemala y luego se pasa a vivir a los Estados Unidos, de madre también guatemalteca y padre cubano, Isacc crece en Florida y aunque se le había visto en papeles pequeños de varias películas como Body of Lies, Agora, Drive y The Bourne Legacy, es apenas en el año 2013 que se dio su mayor descubrimiento en la mejor película de ese año: Inside Llewyn Davis (Balada de un Hombre Común).
Los hermanos Coen lo contratan para dirigirlo en esta película perfecta, donde su actuación lleva el ritmo y fluidez del metraje con la magnífica caracterización de su personaje. Cada emoción la interpretó con sutileza pero dominación del histrionismo a un nivel que pocos logran llegar. Es ahí que su carrera se catapulta para ser contratado en diferentes proyectos que alarguen su currículum y experiencia para ser parte de la lista de actores verdaderamente respetados por su buen trabajo frente a la cámara.
Llega, entonces, el momento donde la lista de películas (buenas películas) en las que aparece Isaac es de admirar. Con A Most Violent Year su interpretación es parte esencial en una película lenta pero segura de lo que quiere contar, incluso comparte química y tensión con la también genial Jessica Chastain.
Lo vemos en Ex Machina y Show Me A Hero, papeles muy diferentes pero en los que el actor desaparece y vemos el carácter de un personaje que parece tener la misma cara, pero las expresiones cambian y las emociones son diferentes. Uno como villano y el otro como político empedernido; película y mini serie que, de paso, vale la pena recomendar además de la excelente actuación de Isaac.
Y, para mejorar el asunto, este año triunfa, como lo mejor en actuación, en Star Wars: The Force Awakens, donde aparece poco, pero ya tiene dominado el arte de crear un personaje con carisma y agrado que sobresalga de los demás. Puede que este sea su pico más de popularidad mundial, pero los que le seguimos la pista desde “Llewyn Davis” sabemos que este actor particular es, desde entonces, de los que vale la pena ver la película porque aparece él. Difícilmente serán sus filmes verdaderamente malos, si está ahí para aportar sus dotes actorales.
Podría ser preocupante que sus roles más recientes sean en franquicias muy conocidas (porque pronto lo veremos en X-Men: Apocalypse) y no en películas más serias y comprometidas que demanden más o atraigan premios, pero hay que pensar en que es un trabajo y se debe hacer balance entre los contratos que ofrecen buena paga. Lo bueno es que, al ser Oscar Isaac, ya sabemos que será una buena interpretación, sin importar de dónde venga, porque es actor con buen estilo, que sabe perderse en su personaje, que aporta carisma dentro y fuera de cámaras y que se debe vigilar como un buen candidato a ser de los grandes de nuestra generación y que perdurará en el tiempo por su constante y sólido trabajo, no simplemente por ser una cara bonita.
Para más artículos de “perfil de actores y actrices en ascenso” podés leer aquí el de Alicia Vikander y el de Donald Glover.
1 Comment